Aurora Cordero Pérez
A poco menos de un mes de que entre en vigor la Ley SB-1070, se percibe poca claridad de parte del Gobierno mexicano sobre la ruta que seguirá para recibir a los connacionales que sean deportados del estado de Arizona, Estados Unidos, denunció el diputado federal del PRD, Armando Ríos Piter.
“Preocupa que el Gobierno no esté tomando la batuta de esta situación cuando el próximo jueves 29 de julio iniciarán las deportaciones masivas de mexicanos. No sabemos si la acción que interpuso el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ante la Suprema Corte de Justicia de aquel país para que la Ley SB 1070 se declare inconstitucional vaya a tener éxito”, puntualizó el legislador.
Dijo que “si no se logra a dar marcha atrás a la ley, se verán afectados miles y miles de mexicanos por la separación de sus familiares, hijos, sobrinos, hermanos que ya nacieron allá, y que del gobierno mexicano poco o nada se sabe que esté haciendo por apoyarlos”.
Ríos Piter destacó que frente a los regresos masivos que sin duda habrá, es necesario que como país nos vayamos preparando; debemos tener todo el universo de actividades en que deberán participar los tres órdenes de gobierno que permitan garantizar la seguridad, protección y cuidado de nuestros connacionales.
Sin embargo, afirmó el legislador, ni la Secretaría de Relaciones Exteriores ni la de Gobernación han dado a conocer algún plan a seguir o las medidas que tomarán para enfrentar esta situación a pesar de que en la Comisión Permanente se hizo un exhorto en este sentido.
El legislador por Guerrero señaló que será fundamental que haya coordinación entre poderes; saber cuáles deberán ser los presupuestos que se destinen para apoyar a quienes regresan y las medidas que se deberán tomar para recibirlos, porque seguramente muchos no cuentan con los recursos económicos para regresar a sus lugares de origen.
Lo mismo, expresó, para darles una respuesta de trabajo y las medidas necesarias para dar protección a sus pertenencias y propiedades, amén de orientaciones psicológicas.
Comentó que sólo se ha informado sobre el cabildeo que están buscando hacer con el gobierno de Estados Unidos, pero que no se ha concretado nada y tampoco se sabe cuáles son los presupuestos y de dónde van a echar mano en término de reasignaciones.
Consideró que la Secretaría de Gobernación y la de Relaciones Exteriores deberán tener una coordinación con los gobiernos fronterizos mexicanos y con los consulados en Arizona para apoyar el regreso de la mejor manera.
Por último, no descartó la participación de organizaciones civiles, las cuales siempre toman la delantera frente a este tipo de “contingencias” a quienes calificó de visionarias y contundentes en sus respuestas frente a los gobiernos que, como en este caso, le falta liderazgo.
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