16 de julio de 2009

Los delitos siguen en aumento de manera alarmante: Soberanes

Aurora Cordero Pérez

En México, la impunidad y la corrupción siguen quebrantando el imperio de la ley, y afectando la seguridad pública, señaló el ombudsman nacional, José Luis Soberanes Fernández.
Al presentar un balance de la situación que guardan los derechos humanos en nuestro país ante la Primera Comisión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, apuntó que “el panorama nacional en materia de seguridad pública es desalentador. Nuestro país enfrenta todos los días el derramamiento de sangre producto de la delincuencia. El registro de pérdidas humanas sigue creciendo y, con ello, el miedo y la desesperanza social. No podemos ignorar el justo reclamo de la sociedad por vivir en un ambiente de paz y bienestar”.
A los legisladores integrantes de la Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia, encabezados por la senadora Yeidckol Polevnsky Gurwitz, reunidos en el salón “Miguel Ramos Arizpe”, del Senado de la República, les manifestó que “una situación tan grave y riesgosa debe enfrentarse con una visión de Estado, donde las coincidencias estén por encima de cualquier diferendo ideológico o partidista”.
Refirió el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes Fernández que los delitos siguen en aumento de manera alarmante, lo que implica un atentado al derecho a la seguridad pública de todos los mexicanos.
Destacó que prácticas como las operaciones encubiertas o de usuarios simulados violan principios esenciales de nuestro sistema como la certeza y la seguridad jurídica, que pueden llegar a tener una grave injerencia en los derechos de particulares, a la vez que sus resultados no se conocen.
Soberanes Fernández resaltó que el clima de inseguridad que vivimos sigue obligando al Estado a hacer uso de las fuerzas armadas en tareas policiales que no son de su competencia, por lo cual reiteró que dicha participación sea temporal y sujeta a un programa verificable, que sirva para avanzar en la capacitación de las policías, y que los casos en que se presuman violaciones de derechos fundamentales por parte de integrantes del ejército sean atendidos e investigados de inmediato.
Señaló que los hechos de violencia que se han recrudecido en la mayor parte de los estados del país y que la situación de Ciudad Juárez es ejemplo de la necesidad de que el Gobierno Federal replantee su estrategia de seguridad pública, ya que la actual parece no rendir los resultados esperados.
“Es preocupante, expresó, que el despliegue de las fuerzas federales no haya detenido la violencia del crimen organizado y el narcotráfico. Por el contrario, ha dado como resultado innumerables quejas por presuntos abusos contra personas inocentes”, acotó.

FUERO DE GUERRA
El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos puso en relieve que la participación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública ha puesto en debate temas como la vigencia del fuero de guerra, que podría ser analizado con amplia responsabilidad y con sentido democrático en el seno del Poder Legislativo, observando en todo momento el principio de legalidad y respeto a los derechos fundamentales de las personas.
Añadió que el gobierno debe actuar de manera eficaz y oportuna e impedir que, en un acto de desesperación, los particulares recurran a formas de autodefensa o justicia por propia mano que diluyan los fundamentos del Estado de Derecho.
En este contexto destacó que los centros penitenciarios son parte esencial de la seguridad pública y hoy enfrentan una profunda crisis, ya que en prácticamente todas las cárceles del país se presentan graves irregularidades como autogobierno, corrupción, impunidad, tráfico de sustancias y armas prohibidas.
Soberanes Fernández destacó las acciones de la CNDH en favor de los indocumentados que ven lesionados sus derechos fundamentales durante su aseguramiento y en las constantes detenciones ilegales de que son objeto, así como los mecanismos para proteger a los mexicanos indocumentados que regresan o son expulsados de Estados Unidos y que con frecuencia sufren abusos de autoridades mexicanas.

ALTA INCIDENCIA EN EL SECUESTRO DE MIGRANTES
Refirió el Informe Especial sobre los Casos de Secuestro en Contra de Migrantes, presentado recientemente a la opinión pública, donde se evidencia la alta incidencia con que ocurre el secuestro de migrantes, lo que constituye una señal de alarma que debe ser atendida por la injusticia que representa. “Es necesario que dicho ilícito merezca una actuación enérgica y efectiva por parte del gobierno”, apuntó.
Aseguró que la protección y defensa de los derechos humanos es parte esencial de nuestra consolidación democrática.
Indicó que este hecho representa un avance indudable contrastando con la situación de escaso respeto que, con notables claroscuros, sigue dándose alrededor del cumplimiento de los derechos fundamentales.
Expresó su convicción de que el esfuerzo conjunto de sociedad y gobierno mantendrá a los derechos humanos como parte de la agenda prioritaria para el desarrollo de México. Recordó que el más alto deber de la CNDH es promover y velar por el Estado de derecho y la democracia, y exhortó a los legisladores a sacar adelante las propuestas y reformas necesarias que demanda el bienestar del país, respetando siempre los valores democráticos y los derechos humanos.

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