Aurora Cordero Pérez
Los ataques contra el Ejército y la Policía Federal en el Estado de Michoacán fueron hechos en represalia la captura de uno de los principales dirigentes del cártel de La Familia michoacana la madrugada de este sábado en Morelia.
El nombre del presunto narcotraficante detenido no ha sido revelado por las autoridades federales, pero se sabe que se encontraba por arriba de Rafael Cedeño, “El Cede”, dentro de la organización criminal.
En las últimas horas, grupos de sicarios han atacado también a militares y dos ellos murieron en Zamora al ser rafagueados por los ocupantes de un vehículo, después de que los soldados abandonaron la sede del 37 Batallón de Infantería.
Los militares asesinados fueron identificados como Ramón Morales y Francisco González, de acuerdo con reportes oficiales.
La muerte de los dos militares se suma a los ataques a las instalaciones de la policía federal, en por lo menos 10 municipios de Michoacán donde hay varios muertos y heridos.
Las agresiones a militares y policías federales se produjeron incluso en hoteles donde éstos se hospedan, como sucedió en Apatzingán donde el hotel Posada del Sol fue atacado por al menos 30 sicarios que rodearon el lugar y al no poder entrar comenzaron a disparar contra las habitaciones y fachadas del mismo.
De acuerdo con informes oficiales, en varias poblaciones de Michoacán, los policías locales y federales se encuentran acuarteladas ante la posibilidad de ataques por parte de grupos ligados al grupo criminal de La Familia michoacana, considerado uno de los grupos más peligrosos que operan en México.
TODO COMENZÓ A LAS 05:30 DE LA MAÑANA
La madrugada de este sábado, un grupo de al menos 30 sicarios intentó tomar por asalto la base de la comandancia de la Policía Federal Preventiva (PFP), Región XVI, en la ciudad de Morelia, en el enfrentamiento, seis elementos de la PFP resultaron lesionados.
Presuntamente, los sicarios pretendían liberar a dos sujetos que estaban detenidos en ese lugar; simultáneamente fueron reportados ataques en las bases de la PFP en las ciudades de Lázaro Cárdenas, Apatzingán, Pátzcuaro y Zitácuaro, donde reportaron tres elementos de la PFP muertos.
De acuerdo a la versión de varios vecinos de las calles Fausto Vega, Escuadrón 201, Mariano López y la calle Décima de la colonia Jardines de Guadalupe, calles todas que confluyen a las instalaciones de la base de la Comandancia Regional número XVI de la PFP , con sede en la ciudad de Morelia, todo comenzó al filo de las 05:30 de la mañana.
A esa hora por todas las calles mencionadas arribaron al menos una decena de vehículo con cerca de 30 sicarios quienes de inmediato comenzaron a disparar en contra de las instalaciones de la sede federal.
Ante esto, los uniformados, quienes fueron tomados por sorpresa, de inmediato repelieron la agresión.
Asimismo, el enfrentamiento se prolongó por espacio de más de 20 minutos, en el que los atacantes utilizaron armas de alto poder: rifles de asalto AR-15, AK-47, granadas de fragmentación, granadas ofensivas calibre .40mm.
Luego de ese tiempo los sicarios se dieron a la fuga con rumbos distintos, sin embargo, en su huida un grupo de ellos impactó una camioneta Mitsubishi con placas del Estado de México en uno de los puentes que conducen al estadio Morelos, el cual se ubica a 500 metros de las instalaciones de la PFP.
En la refriega resultaron lesionados los elementos de la PFP , Gabino García Hernández; José Damián Pérez Rendón; Gerardo Martínez Chavarría; Bernabé Gaitán Jiménez; José Eleazar Gaitán; José Manuel Parra Aguirre.
Cerca de las 06:15 horas se pudo apreciar a un convoy que salió de las instalaciones de la PFP con rumbo desconocido, además de que dos helicópteros de la misma corporación aterrizaron en el lugar aparentemente para trasladar a los detenidos.
En tanto, a la misma hora autoridades estatales y municipales confirmaban un enfrentamiento registrado en las instalaciones de la PFP en la ciudad de Pátzcuaro, sin que se haya registrado bajas o lesionados.
Cabe hacer la aclaración que, de los sicarios que atacaron inicialmente la sede policial, no se sabe su identidad o paradero, este nuevo ataque se da a tan sólo 24 horas de que dos grupos antagónicos de la delincuencia organizada se enfrentaran a tiros entre ellos y a su vez contra la policía en una céntrica colonia de la ciudad capital.
En el lugar de los enfrentamientos fueron recolectados más de mil 500 cascajos percutidos de calibres 7.62, .223mm, .9mm, .38mm, nueve cascajos percutidos de granadas calibre .40mm, una espoleta de granada de fragmentación.
Varios domicilios ubicados principalmente en las calles escuadrón 201 y Mariano López, resultaron con daños en las fachadas, cristales y algunos aparatos electrodomésticos que fueron dañados por los disparos.
Asimismo, resultaron dañados una decena de vehículos los cuales recibieron ráfaga de fuego.
Además de los oficiales de la PFP que resultaron lesionados los más afectados con lo sucedido fueron las decenas de familias que habitan en las calles aledañas a la sede de la PFP. Más de 100 familias cohabitan en esa zona.
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