6 de septiembre de 2009

Se realizó el XXXIII examen nacional de aspirantes a residencias médicas

Aurora Cordero Pérez

Poco más de 23 mil aspirantes a estudiar alguna especialidad participaron en el proceso de aplicación del XXXIII Examen Nacional de Aspirantes a Residencias Médicas (ENARM), que por segunda ocasión se realizó por medios electrónicos en las 11 sedes distribuidas en todo el país, informó el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos.

El secretario de Salud informó que este año se tienen disponibles seis mil 450 lugares para cualquiera de las 24 especialidades que se estudian en instituciones públicas y privadas; sin embargo, hay la posibilidad de que se abran más plazas en los centros privados.

Después de recorrer la sede centro ubicada en la Ciudad de México, acompañado de la Subsecretaria de Innovación y Calidad, Maki Esther Ortiz Domínguez, Córdova Villalobos puntualizó que por segunda ocasión se realizó por medios electrónicos, lo que garantiza absoluta transparencia y seguridad de que sólo se seleccionan quienes tengan buen desempeño.

El protocolo de seguridad abarca desde la elaboración, aseguramiento informático y traslado del banco de reactivos, así como la fragmentación de procesos para prevenir la utilización de la información por personal participante en las diferentes fases, aunado a la vigilancia, auditoria y fe notarial en las áreas y en los momentos críticos.

Otros candados fueron la inclusión de la foto de cada sustentante en la forma de registro, así como en la pantalla donde presenta el examen, por lo que cada computadora estuvo personalizada, previa identificación oficial, lo que eliminó la posibilidad de que se presentara otra persona en lugar o utilizando el nombre del que estaba inscrito.

El secretario de Salud precisó que el hecho de que sea electrónico garantiza prácticamente toda la seguridad del examen, “se quiere que el joven gane su lugar por si mismo, que no haya ningún otro factor que le permita ingresar a la institución si no es que su desempeño fue mejor que el de los demás”.

Además, por primera vez los jóvenes tuvieron la posibilidad de escoger dos opciones de especialidad, de tal forma que si no se quedan en una, tienen la oportunidad de ser seleccionados en la segunda, de acuerdo con sus calificaciones.

Asimismo, se realizó un proceso de estandarización y validación basado en casos clínicos, elaborados y validados por más de 190 profesores de más de 20 Escuelas y Facultades de Medicina del país, públicas y privadas.

Al igual que el año pasado, el aspirante recibió los resultados de su puntaje final al terminar el examen, por lo que pudo conocer su rendimiento.

En esta edición se inscribieron 24 mil cinco médicos, lo que representó un ausentismo de 3.69%, inferior al registrado el año pasado, cuando llegó a 11%.

Del total de participantes, 98% corresponde a médicos provenientes de 79 Escuelas y Facultades de Medicina del país, el resto de 15 países, en especial de Colombia y Bolivia.

De las 11 sedes se ubicaron tres en el Distrito Federal, dos en Guadalajara, Jalisco; dos en Puebla, Puebla; una en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; una en León, Guanajuato; una en Monterrey, Nuevo León y una en Hermosillo, Sonora, para que los jóvenes tuvieran opciones cercanas a su sitio de referencia.

El 70% de los aspirantes escogió cuatro de las ramas troncales, que son medicina interna, cirugía general, ginecología, pediatría y medicina familiar, el resto otra de las 19 especialidades. También tuvieron la oportunidad de seleccionar el lugar y el día en que pudieron asistir, sujeto al cupo de cada sede.

En esta ocasión se elaboraron tres exámenes con nueve ordenamientos distintos cada uno y se intercalaron en inglés y español. Para evitar su robo, estuvieron custodiados por la empresa Cometra y se entregaron al Coordinador de Sede ante el Notario, el Auditor y el Jefe de Tecnologías de la Información de cada sede.

Además, elementos de la AFI vigilaron a estos servidores.

Por otra parte, al hablar de la influenza A (N1/N1), el secretario de Salud dijo que por indicación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México el muestreo de esta enfermedad se realizará sólo en 30% de los casos sospechosos y en centros centinela, de los cuales en México hay más de 250, y son principalmente hospitales.

Precisó que ya no se tomarán muestras al 100% de los casos sospechosos sino sólo a 30%, como se aplica en cualquier otro país del mundo como Estados Unidos, Francia o China y que en caso de que un médico atienda una persona que pudiera estar contagiada con este virus, le puede dar el tratamiento correspondiente. En cambio, se van a muestrear todos aquellos que se hospitalicen con el diagnóstico probable de influenza A (H1/N1).

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