11 de febrero de 2010

Urgió legislador priista a establecer un nuevo modelo de industria energética

Ignacio Arellano Mora

La Cámara de Diputados respaldó la propuesta de Ramón Ramírez Valtierra, a fin de que comparezca Georgina Kessel, secretaria de Energía, para explicar el retraso en la implementación de las reformas en la materia y los conflictos del gobierno corporativo de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Mediante un Punto de Acuerdo, Ramírez Valtierra solicitó también que la funcionaria federal informe del proceso de reconfiguración de las refinerías de Minatitlán y Salamanca, así como de la construcción de la nueva refinería Bicentenario en Tula, Hidalgo.

Recordó que desde el año pasado “el Presidente Calderón se comprometió a que en los siguientes seis meses, finalizarían los trabajos de reconfiguración de la refinería de Minatitlán y se iniciaría la de Salamanca; además de que se comenzaría la construcción de la nueva refinería Bicentenario en Tula; sin embargo, seguimos esperando”.

Asimismo, lamentó que Petróleos Mexicanos (Pemex), haya sido transformado en una fuente de captación desmedida de recursos por el fisco, y se haya disminuido también su gasto programable, mismo que se refleja en una inversión prácticamente nula, en explotación, perforación, refinación y mantenimiento.

El legislador federal priista por Hidalgo, deploró la contradicción entre el titular del Ejecutivo Federal y la secretaria Kessel, pues mientras el primero habla de propuestas concretas para realizar reformas urgentes de segunda generación en materia energética, Georgina Kessel dice que apenas se están analizando.

“En su momento, el Presidente declaró también que el petróleo se está acabando, y la secretaria de Energía nos dice que existen reservas probadas y probables por más de 95 mil millones de barriles”, abundó.

Al referirse a la reforma a Pemex aprobada en 2008, Ramón Ramírez Valtierra expuso que se destinaba a fortalecer en los hechos la autonomía de gestión operativa y administrativa de la paraestatal, a partir de modificaciones de fondo en su estructura orgánica.

Lo anterior, agregó, implica transparencia en la gestión de la empresa y el establecimiento de un sistema eficaz para la rendición de cuentas con responsabilidades claras.

“Sin embargo, la situación ha sido complicada, en particular, por el manejo del gobierno y de la secretaria de Energía, al obstaculizar los procesos y decisiones, sin considerar los graves efectos para Pemex y el país”, aseveró.

El diputado federal priista indicó que prueba de lo anterior, es que desde principios de 2009, Georgina Kessel no convocó en tiempo y forma al Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos, retrasó su instalación y propició con ello, condiciones de ilegalidad en la operación y funcionamiento de la paraestatal.

“Para nuestro país es prioritario construir un nuevo modelo de industria energética, que la convierta en un eslabón esencial de las cadenas productivas y motor del desarrollo económico”, concluyó Ramón Ramírez Valtierra.

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